A medida que las oleadas migratorias hacia America se suceden, los viajeros traen consigo nuevas costumbres, comidas y atuendos. En este artículo analizamos qué vestían los primeros inmigrantes italianos que desembarcaron en nuestras puertos.
Italia no tiene una vestimenta oficial nacional, pero cada región ofrece vestidos tradicionales y representativos de su área. Los campesinos Italianos (que constituyeron la mayoría de la inmigración a America) vestían ropas prácticas e ideales para sus actividades diarias: Pantalones y camisas para los hombres, blusas y polleras para las mujeres. Explora las variaciones temporales y por región en esta pequeña galería de fotos.
Qué vestían las Inmigrantes Italianos
La mayoría de las ropas italianas del Siglo XIX estaban hechas con materiales sencillos, principalmente lana, y mostraban una paleta de colores limitada al negro y los tonos de grises.
Las mujeres campesinas vestían sombreros que cubrían la cabeza con una suerte de sección plana y cuadrada que se curvaba hacia atrás para cubrir parte de la cabeza y la nuca. Esta superficie era perfecta para acarrear cestos al mercado (tradición que inspiró las flores y frutas artificiales en los sombreros utilizados más tarde). Esta preferencia puede verse en muchas de las fotos de arribos a America, aunque su número disminuye a medida que los nuevos pobladores comienzan a adquirir nuevas costumbres y modos.
Los modelos de vestidos utilizados por mujeres de diferentes clases sociales no eran significativamente diferentes, pero el dinero proveía acceso a materiales más exclusivos como seda o terciopelo, y una mayor variedad de colores. A mediados del Siglo XIX las casas italianas de sastrería creaban diseños que combinaban las últimas modas europeas de Francia e Inglaterra, utilizando sedas más baratas importadas de Asia a Milano. Eran comunes los accesorios como pañuelos, abanicos y adornos de cuentas, y los corsets, faldas amplias y crinolinas rígidas.
Muchas mujeres italianas más humildes tenían a su vez hermosos vestidos que reservaban para ocasiones especiales. Teñidos de colores vivos y cubiertos de detalles bordados, estas preciadas prendas se heredaban de madres a hijas por generaciones. Eran frecuentes en ellos los motivos de comida y naturaleza, y los diseños que celebraran la cristiandad.
Los hombres vestían “a lo inglés”, pantalones con camisas cortas y zapatos o botas de cuero o, en el caso de campesinos, con una amplia suela de madera. Los pantalones tenían diseños ligeramente variados, y en general cubrían parte del pie.
Uno de los materiales más versátiles en la historia de las vestimentas tiene su orígen en Italia: El orbace. Esta tela gruesa y hecha de lana era aparentemente utilizada por soldados romanos. Típicamente oscura y de fibras largas, un proceso de rellenado (que consta de aplicar presión a la tela mientras ésta está húmeda, pisándola o utilizando martillos especiales) hace que este material sea resistente al tiempo y al agua.
Luego de un ligero decline en el siglo XVII (debido al apogeo delos diseños ingleses y franceses), la moda Italiana tuvo un renacimiento a finales del 1800, con la creación de diferentes casas que se convertirían en instituciones en el siguiente siglo como Bulgari y luego Versace, Armani y Dolce & Gabbana. La moda masculina también cambió con el avenimiento de la Revolución Industrial, apareciendo por primera vez corbatas y sacos de aspecto amplio con mangas anchas y largas.